Hoy al despertar, como es mi costumbre, me levante y me dirigí al baño a mirarme en el espejo. Por costumbre lo hago para ver cuan ha pasado el tiempo dentro de mi. Para ver si soy el mismo o he cambiado, porque eso de escuchar de alguien que cambié, que no soy el mismo, que soy otra persona y que; en fin solo soy un ser que ha sido el mismo maloso de siempre y, lo peor del asunto es que yo no me había enterado. De pie me puse frente al espejo, mire mis ojos y sobre todo ver la profundidad de ellos para ver dentro de mi, dicen por ahí que parte del conocimiento de la gente son los ojos y su profundidad, los miré, su color café claro seguían del mismo tono. La nariz algo chata también era la misma, ya con la línea recta perdida por tantos golpes recibidos en mi juventud de peleas casi de cruzado contra los fachos del muro en la preparatoria. Si, la nariz seguía igual, un poco de lado por una antigua fractura en su base, es quizá mi nariz el trofeo de tantas peleas por defender mi ideología izquierdista, convicciones y porque no decirlo también, pensamientos y la defensa de mis dichos basados en el conocimiento adquirido de lecturas o discusiones dentro de los grupos de discusión, de ahí que esta nariz es el trofeo y los recuerdos de tales luchas a golpes y como se estilaba: "a mano limpia", o sea partirse la madre a puñetazos y una que otra patada, no obstante los muros utilizaban los nun chakus o chakos que de alguna manera aprendimos a neutralizarlos con nuestra ropa para que se les enredaran y ahí entraba la contraofensiva, mas en algunas ocasiones en un descuido, uno que otro golpe de mano y palos se posaban en narices, boca y labios y no se diga a la cabeza se salvaban, escurriendo sangre por cabeza, nariz o boca dependiendo que parte no fue suficientemente defendida y eran los estragos de ello. ¿Que decir de los fachos? pues dejaban de joder por un tiempo en lo que se replegaban mientras los camaradas nos organizábamos para estar listos de la próxima contienda ideológica.
Continuando de pie, seguí mirando mis boca, mis labios en forma dicen que de corazón yo no lo se de cierto, a lo mas una boca cualquiera labios medios aun conservando su estética y líneas, labios que también sufrieron estos choques con puños palos y patadas, pero en eso pienso que el cuerpo humano es una chingonería, porque se repone aun de heridas graves y quedan igual, quizá no funcionalmente pero no se nota a la vista de quien no le conoce a uno.
Mi mandíbula sigue igual, mirándola, acaso los músculos de los cachetes un poco caídos pro haber bajado de peso quizá o por la falta de ejercicio bocal, pero se mantiene aún en su posición recordándome esa foto que a mi edad preparatoriana conservo.
Mi pelo con viarios cabellos plateados, que ni siquiera van saliendo uniformemente, sino como dicen coloquialmente "uno por aqui otro por allá", pero me gusta verlos, blancos, largos, gruesos que contrastan con el pelo café claro que cubre toda mi cabeza. Anteriormente padeció caída de dos pequeñas zonas, un colega especialista se encargo de ello, ni por edad ni hormonal, era mas bien producto de lo que vulgarmente o vox populi conoce como calvicie, que fortuna para mi cabeza al recuperarse de ello, porque una dosis de búsqueda de tranquilidad y un chingo de concha le devolvieron esos cabellos perdidos, rarezas de la naturaleza, genética o suerte, no lo sé el caso es que cuando miro mi pelo lo veo feliz por ello (¿podría decirse de un cabello que es feliz? pienso y me sonrío) de las pendejadas en las que me pierdo. Mas no se piense estimados lectores que esto es un afán de nihilismo, de egocentrismo, de psicópata, de loco o de padecer el síndrome de narciso, no!, nada mas alejado de lo cierto. Lo hago porque es a veces necesario cuando uno es asediado con discursos acerca de uno y que creen conocer doctamente, uno debe plantarse, mirarse y saberse uno mismo, saberse que uno es, saberse que uno piensa y sobre todo saberse que uno es lo que es y que muchas de las apreciaciones que tienen de uno muchas de las veces son por telemetría mas no por ello cierto.
Así, seguí mirándome, recordando varios pasajes de mi vida, recordándolas con mucho aprecio y porque no decirlo sublimemente, es de tal verdad también que uno mismo a pesar de lo que piensen los demás, uno no se miente a uno mismo porque eso nos lleva a no creernos, a no sentirnos a no ser uno mismo de uno propio.
Me miro,
sigo mirándome,
pensando,
mis ojos cansados de tanto usarlos en las letras,
y sigo observando el espejo.
Transcurre el tiempo, largo, largo se me hace el tiempo, eso me pasa cuando estoy tranquilo, mi rostro tranquilo, relajado, moviendo la boca y cerrando los ojos para mover los músculos de la cara también como es costumbre, para sentir el rostro y reconocerme en el mismo para combinar los pensamientos de mi cerebro y la coordinación kinesiológica de mis movimientos.
De pronto algo inesperado, algo que no estaba en el guión de esa cuasi rutina, la imagen en el espejo se movió, el rostro se veía grande, ahora chico, ahora largo, ahora grande, debo declarar que en ese momento me sobresalté, por no decir me asusté, era la primera vez que me ocurría algo así. Pensé en mis adentros si estaba aún dormido y soñando. Me moví y la imagen seguía teniendo esos cambios, hacia la izquierda, hacia la derecha, arriba y abajo y la imagen seguía haciendo lo mismo.
Así paso un momento, en realidad perdí la noción del tiempo mas de pronto, esa imagen de mi rostro cambió, los ojos se volvieron rojos de un rojo intenso como si fueran de fuego, mi cabello se caía todo, mi boca se movió hacia el lado izquierdo, mis orejas crecieron, mi nariz de orgullosa se hizo mas grande mi piel se estiraba dando lugar a una imágen que jamás habia visto en mi mismo con esos cambios.
Carols lectores, debo decir que mis esfínteres tuve que contener su función, porque luego de esos cambios, la imagen del espejo me hablo y me dijo: -te conozco porque te veo casi a diario -decía el espejo.
no pude contestar, mi voz se ahogo con el ruido de esa voz como si fuera una voz venida del mar allende y continuó diciendo: -tu no eres eso que miras de ti mismo y te sabes de ti mismo y porque te conoces tu mismo y que dices vera como lo propalas a la rosa de los vientos y a los cuatro puntos cardinales-
escuchaba lo que decía el espejo, inmóvil, sorprendido solo haciendo y tratando de hablar sin que me saliera palabra alguna.
-te conozco de mirarte, del diario mas solo tu rostro no tu interior y lo real que eres- seguía diciendo el espejo.
-Tu eres un sujeto que cuando te veo frente a mi solo veo tu exterior, esa piel, esos ojos, esa boca-
continuaba diciendo el espejo;
-eres un impostor, un mentiroso, un hipócrita, un sujeto que planea todos los días a quienes fastidiar-
-eres un cínico, un falto de sinceridad, y un sujeto al que nunca nadie mas tendrá de ti su confianza-
Al escuchar esto aun con el miedo encima, puse atención de todo lo que me seguía diciendo...
-no eres mas que un sujeto sin convicciones, ni ideología que haces todo ello para sentirte que existes o eres, necesitas mentir y creer tus mentiras para saber que vales, pero no! tu no eres mas que eso-
continuaba diciendo y yo poniendole atención y tratando de mantenerme firme y sorpendido con lo boca abierta y abriendo mis ojos a gran tamaño.
-si, todo lo que te digo- seguía diciendo el espejo, -es porque buscas la fama, porque eres un nefastofeles, un sujeto que no tiene credibilidad para mi, por mas que digas en contrario, porque solo conozco tu imagen que veo aqui a diario, mas eso me da pie a juzgarte-
se puso un tiempo de silencio y me quede pensando..
haciendo gala de fuerza y recordando mi falta de miedo juvenil, contestandole le dije:
-como tu espejo me puedes juzgar si solo conoces y conociste superficialmente mi ser y eso a través de una imagen, cual función es la tuya-
el espejo me contestó: -porque el ser espejo y ver tu imagen me da el poder de decirte lo que veo (aún sin conocerte a profundidad ), decirte lo que eres y ese poder por ello, me permite incluso juzgarte, y declararte culpable, asi que declarate culpable porque lo digo yo!-
Sin saber que pensar, y en base a lo que me decía me creí en libertad de dejar que pensara eso el espejo, ¿porque no defenderme? ¿porque no decirle que lo que dice no es verdad si solo me conoce por imagen y por lo que quiere ver? ¿que decir si cuando escribía en ese espejo con la magia del vapor escribía y escribía lo que pensaba? ¿ese solo hecho de ver mi imagen le daba derecho a ese espejo de decirme tanto cuanto me decía?
Sobreponiéndome al miedo, y sin perder mi libertad le contesté:
-no es a fe mía que lo que dices es la verdad, es tu verdad si tan solo por ver mi imagen me juzgas. Si tan solo por la distancia que hay entre tu que reflejas la imagen y yo que soy un ser humano como todos me juzgas como lo peor, mas si alguna imagen mas de todas las que reflejas te han dicho eso y si para ti es verdad lo que dices, concedo sin serlo que tu verdad es la que dices, si con eso me devuelves nuevamente mi rostro que es el único que tengo-
el espejo con ira me respondió:
-no necesito nada de tus concesiones, tus actos que me han sido llegados a través de otros y por consejos me permiten y me dan la libertad y fuerza y la razón de decirte lo que mereces y eres para mi-
Perdiendo mi paciencia y conociendo mi irracional y casi psicopatíca forma de ser solo alcance a decirle:
-pues tu como espejo solo conoces mi imagen, mas ¿alguna vez entraste en mi cuerpo, en mi ser, en las profundidades de mi corazón, en ese hálito que nunca sentí de joven hasta ya adulto y señor?, no! no lo hiciste de cierto, así que solamente me quedo con la historia de mi vida que de vera es hasta aquí, y lo que tu me digas lo acepto, mas por favor, regresa mi rostro, porque mi rostro no es este que reflejas-
el espejo, ya cansado y con flojera, cansado de las repeticiones, solo atinaba a cambiar mas el rostro que era mio, y bostezando, me enfrenta y me dice:
-es la imagen que tienes y yo como tu espejo con esa te quedarás porque eso eres para mi, aun sea solo tu imagen, aun a pesar no conocerte interiormente ni saber de ti mas que por esa imagen tuya, asi que con es te quedaras y es el fin de la discusión-
Al escuchar esto, no me quedo mas remedio que pensar si era verdad lo que me decía el espejo, o me dejo llevar por lo que dijo o cree el espejo, o en verdad a tanto repetirme eso lo soy y no lo acepto.
NO! no me puedo permitir algo que no es, porque no se puede conocer al todo por una parte, por mas que la teoría de sistemas diga que se puede conocer al todo por sus partes, mas un tanto para mi tranquilidad y un total para el juicio del espejo, opte por darme por derrotado y el espejo en su apreciación para su tranquilidad y quizá para mi la tranquilidad de saberse lo contrario en su mayoría de lo que el espejo me dijo.
Con tranquilidad me quede mirándome un rato mas en el espejo y, volviendo a la figura normal que reflejaba mi cara, me sonreí -quizá de nervios- y me dije: -no puede ser- que ese espejo me diga tantas características negativas de la condición humana a mi, en una sola persona todas, todas, cuando he tratado de ser congruente conmigo mismo y con el contexto social.
Al fin, la imagen volvió a ser la misma de cuando me observe al principio, y dándome la media vuelta, me volví sobre mis pasos no sin seguir pensando y filosofando que tan de cierto o no fue lo que dijo el espejo, yo digo que no y al tiempo, que ese me llevará donde realmente algún día llegue y conozcan a mi yo verdadero.